Hiyab. Sobre un corto de 2005 para un problema de hoy

Ya conté en este post cómo conocí al gran amigo Xavi Sala. De repente, mientras desayuno en Oviedo leo en La Razón un comentario que me lo devuelve a la memoria: «Para Occidente una escolar con velo y tanta ropa sólo resultaría peligrosa en caso de incendio».

La problemática respecto al uso del velo por parte de mujeres musulmanas que viven en Europa está más que candente por estos días. Ayer, a propósito de lo sucedido en Madrid donde una alumna tuvo que cambiarse de colegio porque el instituto al que iba decidió ya empezadas las clases prohibir la utilización del velo, comentaban en la radio que el 50 por ciento de los españoles dice que le molesta el uso del velo musulmán y la kipá judía en su país. Sin embargo, no sucede lo mismo con la exhibición de crucifijos, por ejemplo.

La situación nos obliga a pensar una serie de preguntas. ¿Es necesario reglamentar el uso del velo o de la kipá en la escuela? ¿en qué punto eso se convertiría en signo de intolerancia contra lo distinto o conduciría a la fragmentación de la sociedad, la conformación de guetos? ¿cómo cultivar la sociedad multicultural, plural y tolerante que requiere la convivencia en el siglo 21 con este tipo de reglamentaciones? Les recomiendo este interesante artículo de El país. Está claro que pluralidad y universalidad no tienen nada que ver con homogenización y eliminación de «la otredad».

El corto de Xavi Sala cuenta una escena en la vida de Fátima, una niña española de origen musulmán que se enfrenta a su profesora porque no quiere quitarse el velo islámico. Hiyab, rodado ya en 2005 y nominado ese año a los premios Goya, es el cuarto trabajo de Xavi: «El cortometraje es una apología de la tolerancia, no del velo islámico. Sin emitir juicios de valor, solo pretendo que la gente se replantee el tema y lo hable», comenta el director.

El audiovisual es una herramienta potente para «visualizar» los prejuicios, las contradicciones, lo que se es, aquello que las cosas son. Tiene el poder de enfrentarnos a una cierta objetividad, un plano general, un paneo que describe una situación,  como decía Roland Barthes «el cine no sería fotografía animada; en él, el haber-estado-allí desaparecería en favor de un estar-allí de la cosa.» Implica cierta sensación de presencia y por ende de realidad material y discursiva.

Por eso este post. este post para celebrar la «capacidad esclarecedora del cine» (La cita es de Cabrera), en este caso de la mano del corto de Xavi. También para anclar una mirada, otra forma de ver las cosas y, en consecuencia, de pensarlas. Espero que lo disfruten.

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